A Lucas lo que mas le gusta son
sus tardes en el parque, a la salida de la guardería. Cuando con sus amigos juegan
a llenar el tobogán de arena, corre al columpio esperando su turno y cuando sube
se sienta de costado y pide a su madre -mas fuerte mamá, mas fuerte. Busca
siempre una rama y dibuja circuitos de motos en el suelo donde las hormigas corren resignadas
llevadas por a esas manos de gigante inocente. La merienda, un sándwich de
chorizo y un poco de teta de mamá. Su madre eligió dar el pecho desde el primer minuto y ahora lleva
adelante una Lactancia prolongada entre su trabajo y la guarde de Lucas. No lo había planificado así, se dio naturalmente. Comenzó
siendo difícil, Lucas nació por cesárea y gracias a que en el hospital
le ayudaron al piel con piel y su familia que la apoyo saco adelante
este intercambio de nutrientes y fluidos de amor. Y digo intercambio porque a ella
siempre le habían contado los beneficios para su hijo pero nunca imaginó todo lo que podía ser capaz de recibir dando
el pecho.
Pero hoy su madre esta triste.
Tuvo la reunión en el colegio donde en septiembre empieza su nueva etapa escolar y le han dicho que “esa costumbre de dar teta a la salida no lo puede seguir
haciendo” Dicen que es porque ya debe tener autonomía que esta mayor y ya no lo necesita. Se
quedo paralizada. El amamantamiento es un modelo de vínculo para futuros
vínculos, esta demostrado científicamente que desarrollan confianza y los
fortalece como adultos independientes con su autoestima reforzada. ¿El director
de este colegio tendrá alguna idea de lo que significa independiente o
autoestima reforzada? Quedo decepcionada. Es cierto que estos años le ha tocado tener que explicarle a pediatras y
opinólogos de crianza el porque sigue con la lactancia, sus argumentos la habían fortalecido. Pero esta vez lo
mas impactante fue que le sugirieron que se ocultara o mintiera como solución. Como adulta está acostumbrada a lidiar con la hipocresía y podría gestionarlo pero no se veía
teniendo que decirle a Lucas que debía mentir. Siempre le habían dicho en su casa
que puede expresar sus deseos
libremente y si eso no perjudicaba
a nadie estaba en su derecho de hacerlo. Tolerancia, ejerciéndola por
convicción y ejemplo. Eso fue lo que él recibió desde su nacimiento.
Entre muchas cosas que ella tenía
claro era que el destete iba a ser una elección entre ellos dos y nadie interferiría diciendo cuando seria el momento adecuado. Lucas es un niño
sano, fuerte y feliz. Sociable e independiente para su tres años.
Suficientes evidencias para su
madre. Lo necesario para no tener que dar ya mas explicaciones a terceros.
Gracias Carolina !!! Que identificada me siento :)
ResponderEliminarYo no seré la que enseñé a mentir a mi hijo.
Tolerancia